Las elecciones presidenciales de Estados Unidos están programadas para el 5 de noviembre de 2024, y las encuestas reflejan una contienda sumamente reñida entre la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, y el candidato republicano, el expresidente Donald Trump.
Según una encuesta nacional de CNN realizada por SSRS del 20 al 23 de octubre, ambos candidatos están empatados con un 47% de apoyo entre los votantes probables. Y la según la encuesta más reciente de NBC empatados con 48%.
Por otro lado, el promedio de encuestas de FiveThirtyEight al 21 de octubre muestra a Harris con una ligera ventaja de 1,8 puntos porcentuales, obteniendo un 48,2% de la preferencia frente al 46,4% de Trump.
En los estados clave, conocidos como «swing states», las encuestas también reflejan una competencia cerrada. Por ejemplo, en Arizona, Trump cuenta con un 49% de apoyo frente al 47,3% de Harris, mientras que en Georgia, Trump tiene una ligera ventaja con un 48,9% frente al 47% de Harris.
Dada la estrechez de las encuestas y la importancia de los estados clave, es difícil predecir con certeza quién se perfila como ganador de la presidencia en 2025. Los resultados dependerán en gran medida de la participación electoral y de cómo se definan las preferencias en los días previos a la elección.
Lo que nos espera
Vivimos en tiempos de incertidumbre, donde la política y la profecía bíblica parecen entrelazarse de maneras sorprendentes, especialmente con las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos. La situación actual plantea preguntas sobre las implicaciones espirituales y proféticas de la posible unión entre la iglesia y el estado, algo que podría tener profundas consecuencias, incluyendo la implementación de una «ley dominical». A continuación, comparto algunas reflexiones sobre este tema.
Política y Espiritualidad en Tiempos de Crisis
Hoy, más que nunca, debemos ser cuidadosos al involucrarnos en las luchas políticas. No podemos olvidar que nuestra lealtad debe estar primero y principalmente con el reino de Dios. En medio de la polarización actual, es fácil perder de vista nuestra misión espiritual y caer en la trampa de alinearnos con las ideologías de este mundo. Pero ahora más que nunca, debemos recordar que somos ciudadanos del cielo y que nuestra verdadera lucha no es política, sino espiritual.
La Relación entre Política y Religión
Algo que me llama la atención es cómo las elecciones de 2024 en Estados Unidos podrían marcar un antes y un después en la relación entre religión y política. Vemos a líderes políticos, como Donald Trump y Kamala Harris, buscando abiertamente el apoyo de iglesias y figuras religiosas. Este tipo de alianza nunca se había visto con tanta fuerza, y me hace reflexionar sobre las advertencias bíblicas acerca de la unión entre iglesia y estado, que según las profecías, traería consecuencias opresivas, como la posible implementación de una ley dominical, un tema recurrente en la interpretación de los eventos del tiempo del fin.
Líderes Religiosos y Políticos Unidos por un Propósito
Es interesante notar que líderes religiosos conservadores han apoyado firmemente a Donald Trump, viéndolo como una figura clave para restaurar los valores bíblicos en la nación. Esto me recuerda lo que sucedió en los tiempos de Jesús, cuando los líderes religiosos buscaron el poder político para cumplir sus objetivos, lo que finalmente llevó a la crucifixión. De manera similar, este tipo de unión entre política y religión podría llevar a una futura persecución de aquellos que se mantengan fieles a las verdades bíblicas.
Advertencias sobre una Posible Crisis
En medio de esta situación, se están emitiendo advertencias sobre una posible crisis civil en Estados Unidos que podría surgir alrededor de las elecciones. Se han reportado simulacros de seguridad en el Capitolio y la expansión de los poderes militares, lo que indica que las autoridades se están preparando para posibles disturbios o conflictos internos. Esto me hace pensar que estamos viendo señales de los eventos proféticos que se han anunciado, y que la tensión política y social está creciendo en una dirección peligrosa.
Manteniéndose Fiel en Medio de la Tormenta
A pesar de todo esto, lo más importante es mantenernos enfocados en la misión que Dios nos ha encomendado. Debemos predicar el mensaje del tercer ángel, como se menciona en el libro de Apocalipsis, y recordar que el tiempo está cerca. No debemos distraernos con las crisis políticas ni con los problemas que enfrenta el mundo, sino centrarnos en la esperanza de la segunda venida de Cristo. Ahora no es el momento de involucrarse en divisiones políticas, sino de ser fieles al mensaje de Dios y llevar esa luz a otros que la necesitan.
En estos tiempos finales, es crucial que mantengamos nuestros ojos puestos en las enseñanzas bíblicas. Las señales del fin están frente a nosotros, y el tiempo de gracia pronto se cerrará. Es mi oración que nos mantengamos fieles, alertas y listos para lo que viene, sabiendo que nuestra esperanza está en Cristo y en Su pronta venida.
LEY DOMINICAL 