El Fin del Tiempo de Gracia

Capítulo 16—El fin del tiempo de gracia


Nadie sabe cuándo terminará el tiempo de gracia

Dios no nos ha revelado el tiempo cuando terminará este mensaje o cuando el tiempo de gracia llegará a su fin. Aceptemos las cosas reveladas para nosotros y para nuestros hijos, pero no procuremos saber lo que ha sido mantenido secreto en los concilios del Todopoderoso […]. {EUD 193.1}

Me han llegado cartas preguntándome si tengo alguna luz especial en cuanto a la fecha de la terminación del tiempo de gracia, y contesto que solo tengo este mensaje que dar: que ahora es el tiempo de trabajar mientras dure el día, pues viene la noche cuando nadie puede obrar.—Mensajes Selectos 1:224 (1894). {EUD 193.2}

La imposición de la ley dominical precede al fin del tiempo de gracia

El Señor me ha mostrado definidamente que la imagen de la bestia se formará antes de la terminación del tiempo de gracia; y esto debido a que constituirá una gran prueba1 para el pueblo de Dios, mediante la cual se decidirá su destino eterno.—Mensajes Selectos 2:92 (1890). {EUD 193.3}

¿Qué es la “imagen de la bestia”? ¿Y cómo se la formará? La imagen es hecha por la bestia de dos cuernos y es una imagen de la primera bestia.2 Así que para saber a qué se asemeja la imagen y cómo será formada, debemos estudiar los rasgos característicos de la misma bestia: el papado. {EUD 194.1}

Cuando la iglesia primitiva se corrompió al apartarse de la sencillez del Evangelio y al aceptar costumbres y ritos paganos, perdió el Espíritu y el poder de Dios; y para dominar las conciencias buscó el apoyo del poder civil. El resultado fue el papado es decir, una iglesia que dominaba el poder del Estado y se servía de él para promover sus propios fines y especialmente para extirpar la “herejía”. Para que los Estados Unidos formen una imagen de la bestia, el poder religioso debe dominar de tal manera al gobierno civil que la autoridad del Estado sea empleada también por la iglesia para cumplir sus fines […]. {EUD 194.2}

La “imagen de la bestia” representa la forma de protestantismo apóstata que se desarrollará cuando las iglesias protestantes busquen la ayuda del poder civil para la imposición de sus dogmas.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 496, 498 (1911). {EUD 194.3}

El tiempo de gracia termina cuando se completa el sellamiento

Precisamente antes de que entráramos en él [el tiempo de angustia], todos recibimos el sello del Dios viviente. Entonces vi que los cuatro ángeles dejaron de retener los cuatro vientos. Y vi hambre, pestilencia y espada, nación se levantó contra nación, y el mundo entero entró en confusión.—Comentario Bíblico Adventista 7:979 (1846). {EUD 194.4}
Vi ángeles que iban y venían de uno a otro lado del cielo. Un ángel con tintero de escribano en la cintura regresó de la tierra y comunicó a Jesús que había cumplido su encargo, quedando sellados y numerados los santos. Vi entonces que Jesús, quien había estado oficiando ante el arca de los Diez Mandamientos, dejó caer el incensario, y alzando las manos exclamó en alta voz: “Consumado es”.—Primeros Escritos, 279 (1858). {EUD 194.5}

Queda, por así decirlo, solamente un momento de tiempo. Pero aunque ya se levanta nación contra nación, y reino contra reino, no hay todavía conflagración general. Todavía los cuatro vientos son retenidos hasta que los siervos de Dios sean sellados en sus frentes. Entonces las potencias de la tierra ordenarán sus fuerzas para la última gran batalla.—Joyas de los Testimonios 2:369 (1900). {EUD 195.1}
Un ángel que regresa de la tierra anuncia que su obra está terminada; el mundo ha sido sometido a la prueba final, y todos los que han resultado fieles a los preceptos divinos han recibido “el sello del Dios vivo”. Entonces Jesús dejará de interceder en el santuario celestial. Levantará sus manos y con gran voz dirá: “Hecho es”.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 671 (1911). {EUD 195.2}

El tiempo de gracia terminará repentina, inesperadamente

Cuando Jesús cese de interceder por el hombre, los casos de todos estarán decididos para siempre […]. Termina el tiempo de gracia; las intercesiones de Cristo cesan en el cielo. Este tiempo llega finalmente sobre todos en forma repentina, y aquellos que han descuidado la purificación de sus almas mediante la obediencia a la verdad, son encontrados dormidos.—Testimonies for the Church 2:191 (1868). {EUD 195.3}
El fin del tiempo de gracia vendrá repentina e inesperadamente, cuando menos se lo espere; pero podemos hoy tener un registro limpio en el cielo, y saber que Dios nos acepta.—Comentario Bíblico Adventista 7:1000 (1906). {EUD 195.4}

Cuando quede concluida la obra del juicio investigador, quedará también decidida la suerte de todos para vida o para muerte. El tiempo de gracia terminará poco antes de que el Señor aparezca en las nubes del cielo […]. {EUD 195.5}

Antes del diluvio, después que Noé hubo entrado en el arca, Dios le encerró en ella, dejando fuera a los impíos; pero por espacio de siete días el pueblo, no sabiendo que su suerte estaba decidida, continuó en su indiferente búsqueda de placeres y se mofó de las advertencias del juicio que le amenazaba. “Así—dice el Salvador—será también la venida del Hijo del Hombre”. Mateo 24:39. Inadvertida como ladrón a medianoche, llegará la hora decisiva que fija el destino de cada uno, cuando será retirado definitivamente el ofrecimiento de la gracia que se dirigiera a los culpables […]. {EUD 195.6}

Mientras que el hombre de negocios está absorto en el afán de lucro, mientras el amigo de los placeres corre tras ellos, mientras la esclava de la moda está ataviándose, puede llegar el momento en que el Juez de toda la tierra pronuncie la sentencia: “Has sido pesado en la balanza y has sido hallado falto”. Daniel 5:27 (VM).—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 545 (1911). {EUD 196.1}

Actividad humana después del fin del tiempo de gracia

Los justos y los impíos continuarán viviendo en la tierra en su estado mortal, los hombres seguirán plantando y edificando, comiendo y bebiendo, inconscientes todos ellos de que la decisión final e irrevocable ha sido pronunciada en el santuario celestial.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 545 (1911). {EUD 196.2}

Cuando la decisión irrevocable del Santuario haya sido pronunciada y el destino del mundo haya sido determinado para siempre, los habitantes de la tierra no lo sabrán. Las formas de la religión seguirán en vigor entre las muchedumbres de en medio de las cuales el Espíritu de Dios se habrá retirado finalmente; y el celo satánico con el cual el príncipe del mal ha de inspirarlas para que cumplan sus crueles designios, se asemejará al celo por Dios.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 673 (1911). {EUD 196.3}
El trigo y la cizaña crecen “juntamente […] hasta la siega”. En el cumplimiento de los deberes de la vida, los justos serán puestos en contacto con los impíos hasta el mismo fin. Los hijos de la luz están esparcidos entre los hijos de las tinieblas para que todos puedan ver el contraste.—Testimonies for the Church 5:100 (1882). {EUD 196.4}
Cristo declaró que cuando él venga algunos miembros de su pueblo que lo espera estarán ocupados en transacciones comerciales. Algunos estarán sembrando en el campo; otros, recogiendo la cosecha, y otros, moliendo en el molino.—Carta 66, 1894. {EUD 196.5}

Continúan la incredulidad y los placeres prohibidos

El escepticismo y aquello que se llama ciencia han menoscabado en gran medida la fe del mundo cristiano en su Biblia. Se aceptan alegremente errores y fábulas, para que puedan seguir el camino de la complacencia propia y no sentirse alarmados, porque no procuran retener a Dios en su conocimiento. Dicen: “Mañana será como hoy y habrá mucho más abundancia”. Pero en medio de su incredulidad y placeres impíos, se oye el clamor del arcángel y la trompeta de Dios […]. {EUD 197.1}

Cuando en nuestro mundo todo sea actividad febril, inmersa en la ambición egoísta de ganancia, Jesús vendrá como ladrón.—Manuscrito 15b, 1886. {EUD 197.2}
Cuando los que profesan ser el pueblo de Dios se unan con el mundo, viviendo como él vive y compartiendo sus placeres prohibidos; cuando el lujo del mundo se vuelva el lujo de la iglesia; cuando las campanas repiquen a bodas, y todos cuenten en perspectiva con muchos años de prosperidad mundana—entonces, tan repentinamente como el relámpago cruza el cielo, se desvanecerán sus visiones brillantes y sus falaces esperanzas.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 387 (1911). {EUD 197.3}

Los hombres estarán totalmente absortos en los negocios

Cuando Lot amonestó a los miembros de su familia en cuánto a la destrucción de Sodoma, no prestaron atención a sus palabras, sino que lo consideraron como un fanático extremista. La destrucción que vino los encontró desapercibidos. Así será cuando Cristo venga: agricultores, negociantes, abogados, comerciantes, estarán absortos en los negocios, y el día del Señor vendrá sobre ellos como un lazo.—The Review and Herald, 10 de marzo de 1904. {EUD 197.4}

Cuando ministros, agricultores, comerciantes, abogados, personajes importantes y hombres aparentemente piadosos exclamen “Paz y seguridad”, vendrá destrucción repentina. Lucas registra las palabras de Cristo, de que el día de Dios viene como un lazo: la figura de un animal merodeando en el bosque en busca su presa, y ¡ay!, repentinamente es entrampado por el lazo oculto del cazador.—Manuscript Releases 10:266 (1876). {EUD 197.5}

Cuando los hombres están tranquilos, llenos de diversiones, absortos en comprar y vender, entonces se aproxima el ladrón con paso furtivo. Así será la venida del Hijo del hombre.—Carta 21, 1897. {EUD 198.1}

Los dirigentes religiosos estarán llenos de optimismo

Cuando los razonamientos de la filosofía hayan desterrado el temor a los juicios de Dios; cuando los maestros de la religión nos hablen de largos siglos de paz y prosperidad, y el mundo se dedique por completo a sus negocios y placeres, a plantar y edificar, a fiestas y diversiones, y desechando las amonestaciones de Dios, se burle de sus mensajeros, “entonces vendrá sobre ellos destrucción de repente, […] y no escaparán”.—Historia de los Patriarcas y Profetas, 94 (1890). {EUD 198.2}

Venga cuando venga, el día de Dios caerá repentinamente sobre los impíos desprevenidos. El día menos pensado, en medio del curso rutinario de la vida, absortos los hombres en los placeres de la vida, en los negocios, en la caza al dinero, cuando los guías religiosos ensalcen el progreso y la ilustración del mundo, y los moradores de la tierra se dejen arrullar por una falsa seguridad—entonces, como ladrón que a media noche penetra en una morada sin custodia, así caerá la inesperada destrucción sobre los desprevenidos “y no escaparan”.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 42 (1911). {EUD 198.3}

Satanás infiere que ha terminado el tiempo de gracia

En el tiempo de angustia Satanás incita a los impíos quienes rodean al pueblo de Dios para destruirlos. Pero él no sabe que se ha escrito “perdonado” frente a sus nombres en los libros del cielo.—The Review and Herald, 19 de noviembre de 1908. {EUD 198.4}
Así como Satanás influyó en Esaú para que marchase contra Jacob, así también instigará a los malos para que destruyan al pueblo de Dios en el tiempo de angustia. Ve que los ángeles protegen a los que guardan los mandamientos e infiere que sus pecados les han sido perdonados; pero no sabe que la suerte de cada uno de ellos ha sido resuelta en el santuario celestial.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 676 (1911). {EUD 198.5}

Hambre de la palabra

Aquellos que ahora no aprecian, ni estudian, ni valoran profundamente la Palabra de Dios hablada por sus siervos, más adelante tendrán razón para lamentarse amargamente. Vi que el Señor durante el juicio caminará por la tierra al fin del tiempo; las terribles plagas comenzarán a caer. Entonces aquellos que han despreciado la Palabra de Dios y la han valorado a la ligera, “irán errantes de mar a mar; desde el norte hasta el oriente discurrirán buscando palabra de Jehová, y no la hallarán”. Amós 8:12. Hay un hambre en la tierra por oír la Palabra.—Manuscrito 1, 1857. {EUD 199.1}

No más oraciones por los impíos

Los ministros de Dios habrán hecho su última tarea, ofrecido sus últimas oraciones, derramado sus últimas lágrimas amargas por una iglesia rebelde y un pueblo impío. Su última solemne amonestación ha sido dada. Entonces, aquellos que han profesado la verdad y no la han practicado, ¡cuán rápidamente darían casas y terrenos, dólares que han sido acumulados miserablemente y conservados en forma mezquina, para recibir algún consuelo, para que se les explique el camino de salvación, o para oír de sus ministros una palabra de esperanza, o una oración o una exhortación! Pero no, deberán padecer hambre y sed en vano; su sed nunca será saciada, ni podrán obtener consuelo. Sus casos están decididos y fijados para siempre. Es un tiempo temible, terrible.—Manuscrito 1, 1857. {EUD 199.2}

En el tiempo cuando caigan los castigos de Dios sin misericordia, oh, ¡cuánto envidiarán los impíos la condición de los que habitan “al abrigo del Altísimo”: el pabellón en el cual oculta el Señor a todos los que lo han amado y han obedecido sus mandamientos! Para los que sufren a consecuencia de sus pecados, ciertamente será envidiable la suerte de los justos en un tiempo tal. Pero después que termine el tiempo de gracia, la puerta de la misericordia se cerrará para los impíos; no se ofrecerán más oraciones a su favor.—Comentario Bíblico Adventista 3:1168 (1901). {EUD 199.3}

No es posible transferir el carácter

El Señor viene con poder y gran gloria. Entonces separará completamente a los justos de los impíos. Pero el aceite no podrá ser transferido en ese momento a las vasijas de los que no lo tienen. Entonces se cumplirán las palabras de Cristo: “Dos mujeres estarán moliendo juntas; la una será tomada, y la otra dejada. Dos estarán en el campo; el uno será tomado, y el otro dejado”. Los justos y los impíos deben estar relacionados en la obra de la vida. Pero el Señor lee el carácter; él discierne a los que son hijos obedientes, a los que respetan y aman sus mandamientos.—Testimonios para los Ministros, 234 (1895). {EUD 200.1}

Es algo solemne morir, pero es mucho más solemne vivir. Cada pensamiento, palabra y acción de nuestra vida volverá a confrontarnos. Tendremos que seguir siendo durante toda la eternidad lo que nos hayamos hecho durante el tiempo de gracia. La muerte provoca la disolución del cuerpo, pero no produce cambio alguno en nuestro carácter, ni lo cambia tampoco la venida de Cristo; tan solo lo fija para siempre sin posibilidad de cambio.—Joyas de los Testimonios 2:167 (1885). {EUD 200.2}

Otro tiempo de gracia no convencería a los malvados

Tenemos que aprovechar al máximo nuestras oportunidades presentes. No se nos dará otro tiempo de gracia en el cual prepararnos para el cielo. Esta es nuestra única y última oportunidad para formar caracteres que nos harán idóneos para el futuro hogar que el Señor ha preparado para todos los que son obedientes a sus mandamientos.—Carta 20, 1899. {EUD 200.3}

No habrá tiempo de gracia después de la venida del Señor. Los que dicen que lo habrá, están engañados y extraviados. Antes que Cristo venga, existirá un estado de cosas como el que existió antes del diluvio. Y después que el Salvador aparezca en las nubes del cielo, a nadie se le dará otra oportunidad para obtener la salvación. Todos habrán hecho su decisión.—Carta 45, 1891. {EUD 200.4}

Todos serán probados de acuerdo con la luz que han tenido. Los que se tornan de la verdad a las fábulas, no pueden esperar un segundo tiempo de gracia. No habrá un milenio temporal. Si resisten la verdad y usan su influencia para obstruir el camino de modo que otros no la reciban, después que el Espíritu Santo ha traído convicción a sus corazones, nunca serán convencidos. No buscaron la transformación de carácter durante el tiempo de prueba que se les dio, y Cristo no les dará la oportunidad de recorrer nuevamente el camino. La decisión es definitiva.—Carta 25, 1900. {EUD 201.1}

Fuente: Eventos de los Últimos Días

3 comentarios en “El Fin del Tiempo de Gracia

  1. SEGUNDA PARTE….. AUTOBIOGRAFIA

    A manera de aclaración, analicemos dos ejemplos proféticos con relación a los acontecimientos ‘predeterminados’ según las profecías; no con referencia a ‘predeterminados sujetos’, sino, lo que sucedería a través de ellos en cumplimiento de las profecías, leamos:

    Las citas bíblicas de los profetas que anunciaron la llegada de Cristo para identificar el tiempo del cumplimiento de las profecías de Daniel; primero, el tiempo cuando llegaría (9:25); segundo, su muerte (9:26); tercero, el significado de su llegada (2:44); cuarto, Daniel nos aclara cuando acontecería el propósito de esta cuarta profecía (12:4, 9), profecía que corresponde para el futuro ‘tiempo del fin’ de nuestra era moderna (12:4). ‘El tiempo del fin’ que no debe interpretarse como ‘el fin del mundo’, porque algunos líderes cristianos lo enseñan a sus seguidores bajo ese entendimiento (Colosenses 2:8; Salmos 37:29; Lucas 5:5).

    La profecía de Daniel con relación al ‘tiempo del fin’ no se cumplió en el tiempo de Jesús según la siguiente cita bíblica – Lucas 24:44-45. Jesús, mediante una parábola en Mateo 20:1-6, hizo una comparación entre los obreros de una viña y los trabajadores del ‘reino de los cielos’; continuando con los versículos 21, 23; y con el capítulo 25:34 claramente nos indica el significado de la profecía de Daniel antes mencionada. Si leemos en 1 Pedro 1:2, 4-5, 20; 2:9-10, hace referencia a un pueblo no reconocido por Jehovah, lo cual no ha sucedido hasta la actualidad (Lucas 4:21).

    Repasemos en Apocalipsis 2:17 y 14:3 y descubriremos que hemos llegado al esperado ‘tiempo del fin’ con la aparición de ‘los últimos obreros de la viña’ predestinados a tocar ‘la séptima trompeta’ representando al simbólico ‘séptimo ángel apocalíptico’ (Apocalipsis 10:7, 11) quien a su vez detalla la misión del Mesías anunciando el ‘restablecimiento del gobierno teocrático’ el cual ha estado bajo el dominio de ‘el Anticristo’ desde la muerte de Jesús’ (Lucas 4:5-8; Mateo 4:17; 6:33 (comparar con 1 Crónicas 29:11); 2 Corintios 11:13-15; 2 Pedro 2:1; Apocalipsis 5:9; 11:15; 20:6;1 Corintios 15:27-28).

    Asimismo, las profecías del antiguo testamento leídas entre líneas nos indican como aparecería y finalizaría ‘el tiempo de la presencia simbólica del reino de los cielos’ entre los hombres (Zacarias 9:9; 11:12-13; comparar con el libro de Mateo 21:2-7; 26:14-16; 27:3) cuando Juan el Bautista dijo: ‘Arrepiéntanse por que el reino de los cielos se ha acercado’ refiriéndose a Jesús (Mateo 3:2-3). Algunos grupos cristianos contienden que, por una acción traicionera, Judas ha sido condenado; considero que no es así, analicen la cita bíblica que dice: “Seré yo Maestro?” (Mateo 26:21-22), es esta una traición predestinada on la predestinación de un sujeto traicionero? Concluya usted, la misma conclusión sería en estos tiempos para los ‘espurios profetas, etc.’ (Lucas 12:49-56)

    El autor no acostumbra a golpearse el pecho los sábados o los domingos. Ni se identifica como cristiano ejemplar (Lucas 18:13; Mateo 19:21; 1 Corintios 6:9-11); lo que si aplica está en el libro de Mateo 5:37). No cree ser un ‘buen samaritano’, porque no posee la capacidad de ayudar a todo el mundo (Lucas 10:25-37; Hechos 3:6); sin embargo, lo que hace con su mano derecha no lo pregona con su mano izquierda; si ayuda no se fija a quien, no hace donaciones a los miles de organizaciones de caridad como ‘La Madre Teresa’ ni fomenta programas populares; ejemplo, al estilo ‘CLAB’ en Venezuela (Mateo 6:3-4).

    El autor no practica el ahorro, ni es magnate de ninguna industria (Mateo 19:16-23), no es teólogo, ni historiador y mucho menos filósofo. sociólogo o politólogo (1 Corintios 1:25); no es pobre ni rico; pero sí, comparte el dinero que entra en sus bolsillos con los menos privilegiados de nuestra sociedad (Salmos 72:4).

    El autor es muy feliz cuando observa la carita alegre de un niño cuando se va a dormir bien alimentado y descansa sobre una cómoda cama y cubre su cuerpecito con una buena sábana bajo un techo seguro (Isaías 11:4).

    Lo único que perturba la mente, alma, conciencia y cuerpo del autor son sus pecados. Sin embargo, su alma clama: ¡Abba Padre! ¡Abba Padre! ¡Abba Padre! Limpia mis pecados con la sangre de tu único hijo amado Jesucristo. ¡Amén! (1 Juan 1:9)

    El autor es creyente en Jehovah, en su hijo Jesucristo y el Espíritu Santo, no presenta argumentos conflictivos sobre doctrinas controversiales, por ejemplo: si ‘los tres son uno o si cristo fue crucificado en un madero o en una cruz’ u otras doctrinas inspiradas por demonios’ por ejemplo: ¿A quién pertenecemos? (1 Timoteo 4:1; 1 Corintios 1:11-31; 1 Corintios 2; 1 Corintios 3:1-11).

    Las contiendas no nos conducen a la salvación o al castigo divino; lo importante es el sacrificio de un justo para nuestra salvación si tenemos fe en él; así es que, quien nos ‘anuncie las buenas nuevas’ su información deberá estar acorde a ‘mensajes de sabiduría y entendimiento’ acerca de ‘la justicia divina’; asimismo, los mensajes deben estar exentos de lisonjearía o adulaciones hacia líderes religiosos’ (Efesios 1:17-18; Romanos 14:17).

    El autor no se identifica con ningún grupo evangélico, o aquellos grupos que fisgan al individuo, o que hurgan los bolsillos de los creyentes restringiendo nuestro libre albedrio (1 Tesalonicense 2:5-8; 1 Corintios 9:17). El autor se deleita leyendo las profecías bíblicas, sin escuchar sermones para seguidores ineptos (Mateo 22:16; Daniel 12:10; Lucas 6:39-49).

    El autor cree en el poder del ‘Espíritu Santo’ pero, no lo convencen los líderes cristianos con sus exegéticas interpretaciones con palabras lisonjeras mediante las cuales idiotizan a los novicios de la palabra poderosa de ese mismo Dios en quien él cree; o de parte de esos ‘ingenuos’ sus líderes reciben adulaciones (1 Tesalonicenses 2:5-6; Romanos 16:17-18; 2 Timoteo 4:3-4 Apocalipsis 14:3-4).

    Las profecías bíblicas le fascinan y a la vez está convencido que únicamente ‘los escogidos’ tienen el privilegio de discernirlas en el tiempo y momento indicado según la voluntad de nuestro Padre eterno, cuyo nombre es Jehovah (Efesios 1:4, 17-18; Lucas 22:42; Juan 16:13;1 Corintios 2:4; Apocalipsis 12:10; Ezequiel 25:17).

    He aquí. el ‘Elías espiritual nos trae buenas nuevas, anunciando que ‘el final de los tiempos’ YA HA LLEGADO’; este ‘Ensayo empírico e histórico’ nos informa que ‘los obreros de la viña de la undécima hora’ se preparan para recibir sus respectivos sellos en la frente (Mateo 6:33; 20:6; Apocalipsis 2:17; 7:3; Lucas 7:28).

    Estos ‘obreros de la viña’ son los predestinados para ‘profetizar una vez más’ (Apocalipsis 10:11;1 Corintios 2:6-16); identificados como ‘los varones ninivitas residentes forasteros’ que aparecen en ‘el tiempo de gracia’ en señal de ‘el final de los tiempos’ en una lejana Isla Continente figurativamente profetizada por Jesús como ‘La Reina del Sur’(Mateo 12:38-42).

    ¿Qué significa ‘tiempo de gracia’ y el profetizado ‘final de los tiempos’? ¿De qué se trata este ‘tiempo de gracia’? ¿Tiene relación con un ‘tiempo extra’ para el día del Juicio o hace referencia a un ‘tiempo de diversiones pecaminosas’ de nuestra era moderna? El método-empírico-analítico-hermenéutico’ es la propuesta del autor para ‘discernir’ apropiadamente el significado de las tres expresiones proféticas: ‘tiempo de gracia’ (Gálatas 5:21) – ‘el final de los tiempos’ (Daniel 12:4, 8-10) y ‘el tiempo del fin’ (que algunos mal interpretan como ‘el fin del mundo’ (Salmos 37:29: Mateo 24:14)’”

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  2. primera parte «AUTOBIOGRAFIA»

    AUTOBIOGRAFIA

    En cierta ocasión Jesús dijo: “Hoy se ha cumplido esta Escritura…” refiriéndose a las profecías acerca de él, escritas en Isaías 61:1 y Malaquías 3:1 (Lucas 4:17-24). ‘He aquí’, hoy se cumple una profecía similar a la de Juan el Bautista, que dice así: ‘He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día de Jehová, grande y terrible’ (Malaquías 4:5; Apocalipsis 10:5-7; 11:18). Este ‘Elías espiritual’ no es en referencia a Juan el Bautista; prestar atención a la semántica de ambas profecías, ejemplo, comparando entre Isaías 40:3 con Lucas 3:4-7. Apliquemos el método de comparación para este y los subsiguientes párrafos.

    Muchos eruditos han debatido con respecto a estos pasajes bíblicos, hoy tienen la respuesta; Malaquías 4:5 no aplicó a Juan el Bautista, en Lucas 3:7 él dijo: ‘… Quien os enseñó a huir de la ira venidera? Aunque Jesús adujo que Juan era ‘Elías’ el que debía venir; también dijo: “El que tenga oídos, oiga” (Mateo 11: 10-15); recordemos que Jesús utilizó parábolas que el autor de este ‘Ensayo empírico e histórico’, las analizará sin doctrina o influencia cristiana (2 Timoteo 3:16-17); Jesús dijo: ‘La Verdad os hará libres’ (Juan 8:31-38).

    El autor de este ‘Ensayo empírico e histórico’ no es apologista, él es un ávido lector de las profecías bíblicas, autodidacta y precoz. El autor no posee títulos teológicos, académicos ni títulos de la ‘nobleza’ que le acrediten como un ‘exégeta’ para ‘interpretar las profecías’ bíblicas (Mateo 11:8-15; Romanos 11:3-8, 13-14; 1 Corintios 1:21, 24-31; 1 Juan 2:27-29; Daniel 12:3-13; Hechos 2:17-18).

    La ‘auto identificación del autor con la de este personaje profético’ que aparecería en ‘el tiempo del fin’ durante el ‘tiempo de gracia’ y en el ‘final de los tiempos’ puede ser cuestionado (Jeremías 28:15-17; Mateo 27:18; Efesios 5:6-16; 2 Tesalonicenses 2:2-4), pero, este ‘Ensayo empírico e histórico’ prevalece; reafirmando las palabras del Apostol Pablo en los libros de los Hechos 19:20; Romanos 11:13-14; Hebreos 5:13-14; y Tito 2:1, 15).

    Una sugerencia de caución a los líderes cristianos protestantes ‘espurios mensajeros de Dios’ piensen antes de refutar las credenciales que presenta el autor en este ‘Ensayo empírico e histórico’ (Lucas 4:24), ello implicaría que, estarían ‘rechazando simbólicamente a Jesús’ (Lucas 10:16); ahora, por este rechazo lo estarían condenando ‘los gentiles modernos’ durante ‘el tiempo de gracia’ (Mateo 27:15-26). Considerando este ‘tiempo de gracia’ como el último eslabón de las palabras de Jesús con relación a la parábola de ‘los obreros de la viña’ identificados como ‘los obreros de la undécima hora’ (o las 5 de la tarde Mateo 20:1-10); cuya misión es: ‘profetizar otra vez’ con el sonido como de una ‘gran trompeta’ (Isaías 27:13), produciendo el toque inicial de ‘la séptima trompeta’ apocalíptica (Apocalipsis 10:7, 11). Porque escrito está: “… nada hará el señor Dios sin revelar su secreto a sus siervos los profetas’(Amós 3:7-8).

    ‘He aquí’, una vez más un desafío para ‘el tiempo del fin’ al estilo del ‘profeta Elías’ en el tiempo antiguo (1 Reyes 18:22, 36-37). ‘He aquí’, el ‘Elías espiritual’ en ‘el tiempo de gracia’, ‘al final de los tiempos’ o anunciando que ‘el tiempo del fin’ ha llegado a su fase final mediante la ‘revelación del misterio’ guardado por Dios desde ‘la desobediencia del hombre en el principio’ (Genesis 3:15) y a la era moderna. El autor propone un nuevo desafío a los líderes de los grupos religiosos protestantes anglosajones ‘espurios mensajeros de Dios’ (Deuteronomio 18:20-22) conglomerados en ‘LA GRAN CIUDAD’ de N.Y. (Babilonia La Grande la madre de las rameras simbólicas del Apocalipsis 17:5, 18) ; el ‘Elías espiritual moderno’ pide que demuestren que ‘el Consolador’ se manifiesta en ellos (Juan 14:13-14; 20-21; 22, 26) según la promesa de Jesús a sus Apóstoles, pidan en oración que les revele el misterio de ‘los jinetes del Apocalipsis’ 6:1-8.

    Los primeros en pronunciarse con respecto a este ‘Ensayo profético e histórico’, serán los líderes protestantes o políticos cristianos, los presuntuosos por su fama (Mateo 20:25-26; Lucas 5:11); aquellos quienes en ellos se cumplen algunas profecías pronunciadas por Jesús y los Apóstoles nombrados por él; por ejemplo, Mateo 24:11, 24, 35; 27:18; 2 Pedro 2:1-2; 2 Corintios 11:13. Sin embargo, el autor no critica ni condena a ningún grupo religioso porque el único quien los juzgará y condenará será Jehovah (Romanos 2:1-7). Esta es la biografía del autor, por ende, es necesario incluir en esta sección, lo siguiente:

    Las citas bíblicas del párrafo previo nos indican que, entre ellos, hay quienes creen ser Cristo reencarnado o Mesías, ungidos, elegidos, apóstoles, maestros o profetas, la mayoría de ellos, auto identificándose como ‘mensajeros de Jehovah’ para anunciar ‘las buenas nuevas de un reino’. Esa misión le pertenece a los ‘escogidos por Jehovah’ para ser miembros del ‘reino mesiánico’ (Apocalipsis 2:17; 5:9-10; 14:3; Lucas 5:3). El autor propone prestar especial atención y analizar las siguientes citas bíblicas.

    Esos ‘espurios personajes’ fueron profetizados para ayudarnos a ubicarnos en el anunciado ‘tiempo del fin’; por tanto, era necesario su aparecimiento para el cumplimiento del ‘tiempo señalado por Jesús’ (el tiempo del divisionismo cristiano antes de su segunda venida), iniciándose así la anunciada ‘gran apostasía’ (2 Tesalonicenses 2:1-3); la cual nos facilitaría distinguir quien es el genuino servidor de Jehovah o quien no, desenmascarando a los grupos protestantes de ‘los tiempos del fin’ aquellos quienes predican la palabra de Dios según el hombre no según las profecías inspiradas por Dios (Marcos 7:6-9; Lucas 12:51-52, 55-56; 1 Corintios 1:11-13; 6:4-11; ).

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